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Cuatro aprendizajes de librero en El Callejón

Cartas de los lectores
06 de junio de 2025 - 05:05 a. m.
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Si mis queridos amigos visitantes del sector aledaño al Centro Comercial Cedritos 151 creen haber visto a alguien parecido a mí trabajando en la librería El Callejón, deberían saber que esa persona efectivamente soy yo; estoy reemplazando a una gran librera llamada Paloma, mientras goza de merecidas vacaciones. No debí vestirme de ave para hacerlo, sino aprender al menos cuatro cosas.

Primero, lo que significa amar un libro es otra cosa siempre para uno y otro. No trata solo del olor al papel, sino de cómo una persona en particular ama la literatura, o algo a lo que consagra su vida. Está ejerciendo su afición o su profesión lo mejor que puede; es igual a un barbero, o un vendedor de pijamas. Trata de vivir o dormir, no de hacer fraude en cada examen en una universidad europea, haciendo más caro el trabajo que los blancos de veras no quieren hacer.

Segundo, no tienen sentido las quejas chapinerunas de cómo solo hay cultura real en el centro de Bogotá, como en Europa. Además de nuestras librerías, en Cedritos tenemos riqueza cultural expresada en cultura culinaria o huertas comunitarias, igual que se da en el occidente de Bogotá; en la Calle 80, Tunjuelito o La Perseverancia. Tenemos la cultura como práctica; no puro fetiche de consumo.

Tercero, amar a los viejos y a los niños es darles límites, reconociéndose en ellos. Soy como un viejo para mi colega Alejandra, que me ha enseñado cinco veces cómo facturar, pues no entiendo bien esos aparatos; y soy como un niño para Diego mi jefe. Pero me han hecho ver algo más. Distinto a lo que la gente cree, ni los niños ni los viejos son bobos.

Cuarto, complemento a Julián de Zubiría en su preocupación expresada el 3 de junio sobre el descenso en la natalidad en Colombia. Sería válido un Estado que, como Cedritos, acoja más culturas, en lugar de preocuparnos tanto por producir niños segmentándonos por razas, familias, culturas, clases y planteles educativos.

Ricardo Andrés Manrique Granados

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Piedad Hoyos Duque(81806)06 de junio de 2025 - 03:55 p. m.
Ricardo buenos días. Sí, he comprado libros allí y me encanta la atención y la mística de quienes atienden la librería. Siempre he pensado que en estos tiempos tener una librería es una quijotada . En horabuena¡¡
Gines de Pasamonte(86371)06 de junio de 2025 - 12:42 p. m.
¡Muy bien, Ricardo! ¡Enhorabuena por tu labor!
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